Religión instrumento de pasiones.

Las iglesias son el mecanismo para la manifestación de los valores de caridad, empatía y solidaridad entre los hombres. Este es el escenario que nos toca apreciar generalmente en la vida cotidiana.


Pero cuando el fanatismo se adueña de las almas y las pasiones se vuelven incontrolables. Y si agregamos a ello el sentimiento de creer sancionadas y avaladas nuestras acciones por la Divinidad. Tenemos un panorama explosivo.


Esto nos lleva a la conclusión, de que la religión es el instrumento ideal para la manifestación de las pasiones, buenas o malas, del ser humano.


La liturgia.

La liturgia la componen los ritos encaminados a la adoración pública. El ritual lo conforman una serie de acciones, generalmente comunitarias, que se complementan con música, vestuario y coreografía. Y que son el trasfondo de credos religiosos.


El artificio mas utilizado del ritual, es el uso de repeticiones semi- hipnóticas de cantos y frases llamadas oraciones.


Los rosarios son un buen ejemplo de ello. Yo me pregunto lo siguiente:

Si uno ya hizo profesión de fe en un momento, ¿Que objeto tiene hacer múltiples repeticiones de la misma oración? . ¿ Acaso Dios está sordo, o necesita que lo despertemos de su sueño? Esto, desde luego, tiene un objetivo. Dar forma al ritual. Adormecer el consciente, para crear recuerdos permanentes en el subconsciente. Mismos que solidifican la fe, en un credo particular.


Debo informarles que estos rituales, no son un buen mecanismo para la comunicación con el Creador. Existen otros procedimientos mas eficaces y expeditos. Sobre todo, los que van acompañados del respeto a las creencias de los demás. Incluyendo en este rubro a los agnósticos, ateos y liberales.


En realidad los ritos no están dirigidos a honrar a Dios. Sino mas bien, a satisfacer la necesidad de permanencia del creyente. Dios no necesita que lo honremos. Nosotros somos los que lo necesitamos.


Lo periódico, es verdadero. Lo pasajero, es falso

Un punto muy importante, es que la liturgia debe estar acorde a los calendarios en uso. Desde luego, que desde el punto de vista lógico, no hay justificante para el hecho de que los cristianos deban ir a misa, cada vez que la tierra gira siete veces sobre su eje -Aunque los clérigos así lo afirmen- o que se celebre el nacimiento del Mesías, cada vez que la tierra da un giro alrededor del sol. -aunque nadie sepa cuando nació realmente Jesucristo-.


Pero para la gente común. Esta coincidencia entre el ritual y el paso del tiempo, le da estabilidad a la doctrina. Y también a la vida emocional y espiritual del creyente. Fue imprescindible el fijar las fechas de las fiestas acordes al verdadero paso del tiempo, y de sus ciclos naturales. Ello les da no solo a los ritos, sino a toda la doctrina, una perspectiva de eternidad, seguridad y validez.

Recordemos que el hombre identifica lo permanente y lo periódico, con lo verdadero. Y lo pasajero o cambiante, como lo falso.

Por ello, es labor de los católicos pensantes, comenzar a separar la paja del trigo.


Continuará….