Como ser un matapasiones profesional...



1. Eructar en un restaurante.

2. Tener siempre un cigarro en la oreja.

3. Ir al centro comercial con una franelilla de malla.

4. El carro siempre debe oler  a burdel.

5. Dejar crecer la uña del dedo meñique para rascarte…

6. Tener un perrito, un gato o una hawaiana pegado en el tablero del carro…

7. Que los pelos de la nariz se asomen.

8. Que los pelos de la oreja se asomen.

9. Que el repique del celular sean canciones como: Sera que tiene otro, de Papo Man; Yasuri 
Yamileth; Mayonesa, del Chichicuilote; El baile del gorila, de Melody.

10. Invitar a la novia a la playa pero en bus…

11. Utilizar la palabras “X 100pre” en un grafiti para la novia.

12. Utilizar una franela de licra en un cuerpo cuyo estomago no es muy agraciado (los llamados 4 barrigas).

13. Vivir a costilla de los padres.

14. Hacer ruidos infrahumanos mientras tomas una sopa.

15. Pasar todo el día hablando de cómo son distintas las cosas en Miami, Mexico, España, etc….

16. Decir que no puedes comer X cosa porque “tienes alborotadas las hemorroides”.

17. Ir al gimnasio con licras (hombre).

18. Tener siempre algún alimento pegado en los frenillos.

19. Comprarle a la novia una rosas de esas que venden en los semáforos.

20. Que la vianda sea de Power Ranger.

21. Invitar a la chica que te gusta a una discoteca y, que luego ella te lleve en tu carro hasta tu casa por causa de los 5 whiskys que te tomaste.

22. Llamar “Jamon” a un beso profundo.

23. Acabar con la mesa de los quesos en una boda

24. Hacer bombitas con la saliva.

25. Meterte el recibo de la luz, del agua, del condominio, un porta lentes y tres bolígrafos en el bolsillo de la guayabera.

26. Salir a barrer el frente en dormilona... sin nada abajo.

27. Ponerle tiritas a las patas de los lentes.

Historia de un nuevo comienzo...



Esta es la historia de un país al sur del ecuador. Un país que llevaba más de una década padeciendo conflictos sociales, donde poco a poco el sesgo político dividía el corazón de todos sus habitantes, convirtiéndolos en colores, consignas y franelas. La economía se deterioraba con cada año que pasaba. Un país donde el bien de un grupo era más importante que el bien del individuo. Irónicamente el lema del gobierno era “poder para el pueblo” pero todos se preguntaban ¿a quienes se refería con el pueblo? Puesto que cada año dicho poder se concentraba cada vez en menos personas. El centralismo era el modelo favorito a elegir. Sus decisiones claramente eran para sus partidarios políticos. ¿Será que unos eran más pueblo que otros?…

Y un día todo cambio…

Un claro día de enero de un año cabalístico, un nuevo mandatario asumió el poder en este país. Este mandatario ubicado en el palco presidencial frente a cientos de miles de ciudadanos y millones de televidentes realizó un discurso que reactivó la razón y el orgullo de todo un país.

Fue honesto, exclamó que la economía estaba altamente debilitada como consecuencia de la corrupción y la irresponsabilidad. Hubo evasión –dijo- en la toma de decisiones difíciles y no se preparó al país para una nueva era mundial. Proclamó el fin de la polarización, de las pasiones, de las falsas promesas, de la ideología anticuada que durante tantos años mutiló la economía.

Dijo frente a todos los allí presente, de manera tranquila pero con energía que los obstáculos que se enfrentaban eran reales. Eran graves y numerosos. No se iban a poder superar fácilmente, ni en un corto periodo de tiempo. Pero quiso que el país supiera algo: se iban a superar. Era momento de elegir la historia de cada uno de ellos. Habría que trabajar duro, porque la grandeza nunca es algo regalado-dijo-. Habría que ganársela. Su gobierno no se caracterizaría por los atajos o por el conformarse con poco. Su gobierno no sería para pusilánimes, para los que prefieren el ocio y la manutención al trabajo. Sería más bien para los que corren riesgos, los emprendedores, los que producen, los que trabajan.

Ese día el ambiente del país era de felicidad, optimismo y libertad… La gente respiraba orgullo, respiraba autoestima. Sabían que estaban siendo parte de la historia, que este momento sería descrito con la misma energía y emoción a las próximas generaciones de ciudadanos.

Desde el balcón continuaba el discurso de este joven, ahora mandatario de una nación. Joven que por años luchó por la libertad del individuo. Siempre rodeado de intelectuales, productores, emprendedores, en su mayoría gente joven que no dejaban de crear a pesar de las difíciles circunstancias en las que se encontraban el país para aquel entonces.

Ese discurso fue el sistema de encendido de un motor olvidado de infinita fuerza, cada idea que planteaba, cada palabra que emergía de su boca era combustible para esa maquinaria. Resalto que nuestras mentes no eran menos inventivas, nuestras mercancías y nuestros servicios no eran menos necesarios que la semana pasada, el mes pasado o el año pasado. Nuestra capacidad sigue intacta-comentó-. El tiempo de adherirnos firmemente a nuestras ideologías, de proteger intereses irracionales y de retrasar las decisiones desagradables ciertamente ha concluido.

A partir de ese día, los ciudadanos se levantaron, se sacudieron el polvo, y reanudaron el trabajo de rehacer una nación. Llenos de orgullo, racionalidad y productividad.

Platon y su sistema educativo



Para nadie es un secreto que la educación venezolana –y de toda América- es un anacrónico  sistema de arbitrariedad y poder. Las instituciones han desviado su norte, han atacado los problemas educativos desde puntos de vistas errados en donde se imponen métodos que generan sentimientos a los alumnos de rechazo, estrés, que hunde al mismo casi voluntariamente en una laguna fangosa de rechazo a la educación. El sistema educativo está generando consumidores con derecho a voto, pero no ciudadanos pensantes.

El resultado práctico de todo esto es una legión de niños ignorantes, inequipados para una exitosa vida. Produce estudiantes que son ignorantes suficientes como para ser un adulto funcional, y produce estudiantes que son incapaces de razonar apropiada, rigurosa y críticamente.

Platón gran filósofo griego escribió un libro llamado La Republica, obra maestra donde vierte todos sus pensamientos sobre la institución de un Estado en donde la racionalidad es la clave para la evolución política. Junto con Sócrates opina entre otros temas sobre la forma de educar a los hombres para que sean buenos ciudadanos. 


Escuela de Pensadores

La escuela platónica es una escuela donde se “confía” que los procedimientos racionales se educan y se ejercitan, que son los que por si van a generar mejores ciudadanos porque para Platón el ser ciudadano significar el tener voz y pensamientos propios, un aprendizaje indisolublemente unido a la filosofía y entendamos como filosofía la pura ejercitación de la racionalidad.

El educador debe tener un fin, el extraer el conocimiento del alumno y no imponerle conocimientos sin razón ni entendimiento del mismo. Implica enseñar a los alumnos a usar estrategias de pensamiento a la hora de involucrarse en desafíos intelectuales. 

Por ejemplo en materias como historia los temas se debe impartir secuencial y sistemáticamente, combinando la narración de los eventos con los conocimientos de las instituciones sociales, políticas y económicas y las diversas fases del desarrollo cultural de la época a estudiar.

Cuatro fuerzas Culturales

Existen cuatro fuerzas culturales que interactúan al mismo tiempo poniendo en funcionamiento procesos básicos del pensamiento.

Estas fuerzas son:

Explicación.
Modelado.
Explicación y modelado.
Interacción.

Los pasos que involucran este proceso son:

Explicar directamente la importancia de tomar decisiones estratégicas (explicación), describiendo una situación en la que él mismo recurrió a una estrategia de toma de decisiones para elegir algo (modelado).

Luego, enseña una estrategia simple para tomar decisiones. Sugiere buscar opciones creativas y pensar cuidadosamente los pros y los contras antes de hacer la elección. 

Explicar cada paso de la estrategia, dibujar un modelo en el pizarrón (explicación y modelado).

Los alumnos, luego trabajan en grupos pequeños y usan esa estrategia para reelaborar una decisión acerca de un tema escolar específico (Ej. la segunda guerra mundial). El docente les dice que piensen como si fueran los protagonistas (ponerse en el lugar del otro). ¿Qué opciones tienen?.¿Qué decisiones tomarían?. ¿Por qué? (interacción).

En todo este proceso es importante que el lenguaje proporcione claves que indiquen como evaluarse e interpretarse las afirmaciones ya que hay un pensamiento implícito en la afirmación: palabras que indiquen si se trata por ejemplo, de una especulación, de una hipótesis que se está investigando o de una deducción basada en evidencias recogidas cuidadosamente.

El sistema educativo  tiene que tener como misión fomentar o permitir que sea el alumno por sí mismo el que vaya descubriendo y desarrollando unas capacidades que sin duda tiene, en lugar de ir introduciendo en ese individuo inmaduro –y por lo tanto moldeable- contenido o ideas externas a ellos que no pueden someter o que no le damos los recursos para someter a una crítica.

La Infidelidad es ¿realmente mala?



Sé que muchas mujeres –y algunos hombres- van a discrepar de lo que a continuación expresare, pero si lo piensan desde un nivel libre de apego verán que es algo que tiene cierta lógica.

La infidelidad genera un mar de emociones y consecuencias negativas como violencia, dolor, decepción, desconfianza, rabia, odio, vallenatos (pregúntenle a Jorge Celedon, Silvestre Dangond o Diomedez), aumento de peso (o disminución), mensajes incriminatorios de voz (o texto), rayones en carros, peas, maletas en el patio, improperios en el Facebook, y otros daños colaterales –para no seguir dando ideas-, no hay duda de eso, pero si pensamos mas allá de las emociones y un poco mas con la cabeza (razón) mi pregunta es ¿Es realmente malo?

Detrás de todas esas emociones surgen varias preguntas… ¿porque lo hizo? ¿Fui yo culpable? ¿Fue el letargo de nuestro matrimonio (noviazgo)?, ¿La poca intimidad?, ¿mi temperamento?, ¿mi obsesión al trabajo?, ¿mis kilos de más (o menos)?, ¿mi desgano?, o fue… ¿su inseguridad?, ¿su falta de comunicación?, ¿su rechazo al compromiso?, ¿su inmadurez?... Después de responder todas esas inquietudes es aquí donde viene el zenith de mi análisis…

Si fue tu culpa, pues despierta de ese letargo, pisa la realidad y ponte a trabajar sobre tus errores y recupera a tu pareja.

Si fue culpa de tu pareja no pierdas mas el tiempo, dale gracias que te mostro su verdadera cara, sus escasos valores y olvídate de él (o ella) y continua tu vida.

A final de todo, ambos resultados son positivos porque: por un lado te das cuenta de tus errores y trataras de corregirlos y, por el otro lado te das cuenta la verdadera personalidad de tu pareja y decides terminar la relación puesto que no cumple tus expectativas.

¿Por qué personas ordinaras se convierten en personas malvadas?



Nací en una urbanización de clase media al sur de Maracaibo, rodeado de al menos 30 niños en la zona, éramos todos coetáneos, invertíamos mucho de nuestro tiempo en jugar al perrito, flichitas, escondite, cero contra por cero, entre otros. Hacíamos torneos de metras, trompos, bicicletas, pelota de goma, etc. Fuimos educados en colegios privados o subsidiados. Nuestros padres eran trabajadores, con un salario modesto, vehículo propio y en su mayoría profesionales. Eran niños excelentes. Todos teníamos la misma oportunidad para salir adelante.

En el pasar de los años algunos de mis amigos terminaron siendo la versión real de Dr. Jekyll y Mr. Hyde. Unos terminaron traficando drogas, otros coleccionando prontuarios policiales, otros muertos en un ajuste de cuentas. ¿Por qué esa seducción hacia la ectopia social?

El poder, maridaje perfecto para el mal

El poder en una persona genera varios cambios en su conducta y es profundizado –en la mayoría de los casos- por el entorno y el sistema en el cual se encuentra. Estos cambios son los siguientes:

• Deshumanización de otros.
• Deindividualiacion del ser (anonimidad).
• Difusión de responsabilidad personal.
• Obediencia ciega a la autoridad.
• No critica y conformidad de un grupo de normas.
• Tolerancia pasiva a la maldad.

Resultados:

• Exterminio de los Otomanos
• Sierra Leona
• Terror rojo (guerra civil rusa)
• Auschwitz
• Prision Abu Ghraib
• Templo del pueblo en Guyana
• Vuelos de la muerte en Argentina.
• Crimen Organizado.


Hemos visto como soldados exterminan pueblos por órdenes de sus superiores o humillan a presos de guerra solo porque no tenían a quien rendirle cuentas. Pandillas que disfrutan el sentimiento de poder al llegar a un sitio y ver el temor de los allí presentes. Presidentes que ordenan a las 10pm informes para las 7am del siguiente dia y estos nunca son leidos. Policías que extorsionan a comerciantes para evitar ser secuestrados. Profesores que ofrecen “vías rapidas” para pasar un curso.

Si el poder no es la razón de la maldad… está muy cerca. Pero mi pregunta es: ¿son manzanas podridas la causante del mal o es la sesta las que las pudre?

“El mundo no está amenazado por las malas personas sino por aquellos que permiten la maldad”
Albert Einstein.

Rebelion en la granja por George Orwell



En esta fábula alegórica Orwell plasma su condena a la sociedad totalitaria y su desilución por las injusticias sociales. Toca el tema del "socialismo" y su poder para manipular las masas, la bipolaridad entre la ideologia y la practica, el nacionalismo, las mentiras, y la sed del poder.

En este relato Orwell usa personajes de animales para representar ideas políticas, hechos históricos, la propia revolución y la corrupción que causa el poder. Los animales de la obra representan conductas humanas: las ovejas sólo siguen al rebaño, los caballos son trabajadores incansables, los cerdos obtienen el poder absoluto que corrompe y vuelve dictador a quien lo ostenta. Los perros, representan a la "policía secreta".

En esta obra encontraremos muchisimas similitudes con varios mandatarios de paises latinoamericanos de la actualidad. Un excelente libro para reflexionar!