Ley de descentralización y propuesta de referéndum



Se vio hace poco un show mediático y político en el consejo legislativo del Estado Zulia. Extrañamente parecido a los que tantos venezolanos hemos visto del lado oficialista. Legisladores emocionalmente energéticos proclamando sus puntos de vista –algunos respetables, otros no tanto- sobre la nueva medida “Show” del presidente Chavez, el cual mediante artilugios y maleficios constitucionales  logra la captura por parte del estado–atento con el termino que utilizo- de los puertos, aeropuertos y carreteras mediante una ley que irónicamente se llama “Ley de Descentralización”.

 

El evento

Ahora bien, dicho evento fue caracterizado por la masiva afluencia de público en casi su total por partidarios de la oposición –claramente preparado -. Se observaron las típicas escenas de control colectivo, cada vez que el orador elevaba más de lo normal el tono de su voz, el público elevaba sus consignas y aplausos ¿Familiar verdad?

 

El referéndum y sus escenarios

Seguimos, allí los legisladores votaron por la realización de un referéndum consultivo sobre la Ley de descentralización. Textualmente de la boca de Eliseo Fermín “La intención es consultarle al soberano, quien quiere que maneje los puertos, aeropuertos y carreteras”. Ahora bien aquí en donde la lógica de la oposición empieza a quebrarse, primeramente, hemos escuchado infinidades de veces a todos los voceros de la oposición decir el venezolano nunca está en paz porque vivimos en un país de elecciones. Ahora ellos proponen “otra elección más!” –Como diría el ciudadano-. Para secundar, la Ley de Descentralización tiene carácter nacional, es decir, que no se puede aplicar en un estado si y en otro no. La única manera de que sea viable el referéndum es que se realice un SI o NO a “nivel nacional”. Ahora desarrollemos este escenario, a nivel nacional no hay gran revuelto por esta ley en parte porque las alcaldías y las gobernaciones en su mayoría son chavistas, y a los ciudadanos de esos estados le daría igual ganar o no ganar dado que indistintamente del resultado estos serían controlado por el oficialismo. Ahora la pregunta es ¿está la oposición dispuesta y preparada para salir a pie, casa por casa a nivel nacional para captar votos? Creo que se la están poniendo papaya a Chavez para otra victoria más y eso debilitaría la moral de la oposición a nivel nacional por una pataleta regional. ¿Donde están los estrategas de la oposición? Parece ser que solo piensan en el día a día y no en escenarios políticos.


Andres Marquina

Democracia Irracional...



El venezolano a través de los años tristemente ha involucionado bien sea por frustraciones, ignorancia o desesperación, se ha llegado a un punto tal que pasamos de ser Homo Sapiens y nos convertimos en simples borregos. Tanto la oposición como los chavistas se están transformando (o están ya transformados) en individuos teledirigidos. Esto explica el escaso análisis por parte de la mayoría de venezolanos en aspectos del gobierno y de la oposición que son altamente condenables. Solo basta para un individuo de la oposición escuchar alguna aseveración en “Aló Ciudadano” para aceptarla como verdad absoluta, de igual manera un chavista con algún programa de VTV. Lamentablemente el venezolano de hoy día no tiene capacidad de abstracción, es decir, de extraer una idea profundizarla y desarrollar un análisis sobre cosas que no se ven -la democracia, la justicia, derechos del individuo, etc.-, aun las cosas que se “ven” no las puede “comprender”.

¿Vivimos una verdadera democracia?
El rizoma de la democracia parte de la idea de que el elector evalúa las diferentes opciones políticas que se le presentan y basa su decisión tomando en cuenta sus prioridades, intereses, así como los costos, ventajas, desventajas, riesgos y beneficios que espera obtener al decidir por una determinada opción política. En otras palabras el elector realiza un proceso interno de discernimiento, basado en un pensamiento lógico y racional. Sin embargo, el voto de los venezolanos es más emotivo que racional, predomina más la pasión que la razón. 

 “La democracia se basa en el ciudadano, si el ciudadano elige de manera irracional el resultado es la autodestrucción”. De allí él porque llevamos más de 50 años eligiendo políticos mediocres que ha ocasionado septicemia en todos los poderes del estado. Si el voto no es consciente o no es racional, la democracia no funciona, dado que es un sistema que se basa en la “racionalidad”. Y eso hace toda la diferencia.


Andres Marquina