Genesis

Desde hace más de 15 años comenzó un proceso de exteriorización de un venezolano que antes se encontraba –afortunadamente- dormido. Dicho venezolano posee diferentes características lamentablemente la mayoría de ellas de carácter reactivo y poco racional, carácter alimentado por los complejos, rencores y baja autoestima, donde el sonido de la “revolución” es más alto que la “razón”.


Y Monstruo despertó…


Eventos históricos sirvieron como un cantar del gallo anunciando un nuevo día, una nueva época para Venezuela. Despertó el venezolano subnormal, el guiado por la corriente de las emociones, por ideas trasnochadas, por rencores estúpidos.


Personalidad del Venezolano Subnormal


El venezolano subnormal deja el “orgullo propio” por uno “colectivo”. Utiliza agresividad verbal que tacha de anti popular cualquier postura contraria. Denuncia complots de medios de comunicación como exitosa arma para combatir las opiniones adversas. Otro rasgo es la apelación al “sentimiento popular” con cantos y manifestaciones populares glorificando el color de sus banderas. Demoniza cualquier propuesta que origine del adversario. Rechaza el dialogo y el debate.


El venezolano subnormal se encuentra en cualquier estrato social y nivel de educación. Por su baja autoestima posee poca dignidad. No le importa ser obligado a ir a marchas políticas, ni entrar a su trabajo con ropas llenas de consignas, ni rotular el vidrio trasero de su vehículo con personalidades carismáticas como el Che, Castro o Chavez. Su vocablo -corto en verbo- utiliza frases refritas espetadas por líderes políticos. Intimida al adversario con eslóganes como fascista, Oligarcas, escuálidos, etc. Se autodenomina de pensamiento progresista -sin saber su verdadero significado-.

El venezolano subnormal posee un odio idiota hacia Estados Unidos –hasta condena a administraciones actuales por hechos ocurridos siglos atrás-. Cree que los pobres son pobres por culpa de los ricos. Pierde el tiempo criticando los viejos gobiernos y al mismo tiempo vislumbra un futuro utópico, sin preocuparse por el día a día -de alli el porque escuchamos numerosamente la palabra "proyecto" . Le encanta ser un mantenido del gobierno –y algunos llegan a pensar que es un derecho-.

El venezolano subnormal es un resentido social que viola la razón, realiza un hara-kiri al intelecto e inmola la cultura y el arte... ¿Eres uno de ellos?