Todos los días recibimos reportes sobre clima, tráfico, espectáculos, resultado de juegos, lotería, bolsa, inflación, muertes violentas, reservas del estado, etc. Ahora imagínate que la fuente de esa información sea tu peor enemigo, ¿confiarías en la veracidad de esas noticias? ¿No? ¿Por qué?, ahora imagina que esa información la obtengas de tu mejor amigo ¿ahora si confiarías? ¿Seguro?...

Las emociones también son medios distorsionadores de la realidad. Podemos sentir amor, soledad, rabia, alegría, tristeza, odio, pero nunca debemos utilizar estas u otras emociones como fuentes de conocimiento o de confianza para llegar a una conclusión. El hecho de que sientas y confíes intensamente que 1 + 1 es igual a 6 no significa nada si no lo procesas mediante la observación, el razonamiento y la lógica.

Es muy conocido en los discursos políticos el uso de contenidos emotivos –imágenes, sonidos, frases, etc.-. ¿Por qué? Para intentar bloquear el proceso de análisis y razonamiento de la persona que recibe el mensaje, sustituyéndolo así por sentimientos y emociones generalmente paternales o de frustración social. Usualmente estos sentimientos ya se encuentran en la mente del receptor, sin embargo este al escuchar el discurso político amplifica dichas emociones.

El pensamiento crítico, es decir, libres de sentimientos o emociones, es una herramienta vital para evitar manipulaciones de contenido por parte de políticos y medios de comunicación. El obviar esto podría causar que un asesinato sea una acción respetable, un golpe de estado algo honorable y que las mentiras parezcan verdades.

PD: Globovisión, RCTV, VTV, TeleSur, analistas –tanto de oposición como del oficialismo- partidos políticos, ministros y mandatarios, informan de manera tergiversada y parcializada. Así que comencemos a pensar con nuestras propias mentes y dejemos de ser manipulados.

Recomendación: Escuchen y lean tanto medios de la oposición como del oficialismo, y saquen sus propias conclusiones.